2 mar 2018

Sin título (de momento)


La ejecución de algo menos de 70 páginas me mantuvieron despierta hasta las tantas. Eso, y tú recuerdo. Entonces me acordé de la película 3 metros sobre el cielo, y me imaginé montada en tu moto corriendo por la M-30, esquivando los coches de la carretera y soportando el aire gélido de estos días en Madrid que se colaba por debajo de mi casco, mientras tu realidad, se desfiguraba a la misma velocidad que me jodía estar enamorándome de ti.

Me jode (sí, hablo mal y me gusta) que te hayas convertido en el motivo de mi desconcentración, y me jode (sí, otra vez, y de nuevo no con la connotación que tú te imaginas) porque esto no me va a llevar a ningún lado bueno.

Cuando los caminos se bifurcan puede que algún día se puedan volver a encontrar, en otro tiempo y en otra dimensión, pero nunca igual. Nos ha pasado, pero no es el tiempo y ya nunca lo será. Han pasado muchos años desde aquellas míticas fiestas en el colegio, aunque me ha gustado recordar aquellos nervios que sentía cuando bajaba la cuesta y te veía. Esos ojos negros azabache, esa mirada penetrante… no siempre recordé pero  jamás olvidé.

Los polos opuestos no se atraen. Eso no es cierto. No somos imanes. Tú el chico malo, aunque no tanto como querías aparentar, que vivía intensamente el presente. Yo la chica buena y medianamente estudiosa que se preocupaba por su futuro. Esto no lo debí de hacer muy bien, la verdad. Tú de risas, yo dueña de silencios que contenían la pena que me producía que tus palabras fuesen dirigidas hacía nuestra dirección pero no hacía mí.  Y lo mejor es que ella no te hacía caso. Sí, lo mejor. No creo que hubiese llevado muy bien verte en mi grupo de amigos estando con mi amiga. Y lo peor, es que con el tiempo, dejé de saber de ti. Y lo mejor es que alguna vez, contadas, te veía, pero no era lo mismo aunque algo sentía… o no, no lo sé. ¡Qué más da!

Hazme un favor, sal de mi cabeza, aunque sé que he sido yo quién te ha metido en ella, y cuídate mucho.

Por cierto, una última cosa, quiero que sepas que odio los tíos como tú: irresistibles

No hay comentarios: